El antecedente de lo que hoy conocemos como un hotel viene desde la Nueva España
Antes de que existieran los hoteles y moteles de hoy en día, de los cuales se pueden ver mucho sobre Calzada de Tlalpan en la Ciudad de México, existían los mesones. Estos eran lugares que se les prestaba a aquellos que visitaban la Nueva España y no tenían un lugar donde quedarse, además la mayoría se encontraba en las afueras de la gran ciudad.
Según el texto La Ciudad que nos inventa de Héctor de Mauleón en el año 1526, Pedro Hernández Paniagua solicitó un permiso para poder crear un mesón al sur de la capital, al estar cerca del centro es considerado como el pionero del concepto de alojamiento en la Ciudad de México, se dice además que servía comida a los huéspedes y lavaba su ropa, por lo que era una gran atención para ese entonces.
Sin embargo este no es considerado el primer hotel como lo conocemos hoy en día, aunque sí su antecedente. Según Mauleón: “A mediados del siglo XIX el hotel llegó a la Ciudad dispuesto a conquistar el favor de los viajeros. En 1842 funcionaban el Hotel Vergara (en la actual calle Bolívar)y el de La Gran Sociedad (en la calle 16 de Septiembre)”. Siguiendo esta línea el autor escribió que el primer motel de la Ciudad de México fue el llamado El Silencio en 1935 ubicado en la Calzada de Tlalpan.
Para el caso del primer hotel de la Ciudad de México, se trató del Hotel de la Gran Sociedad fundado en 1818 y era considerado hasta la época del Porfiriato el primero de la Ciudad, pero años después en 1898 dejó de serlo ya que lo demolieron, dando paso al ahora considerado el más antiguo.
Se trataba de una casa adaptada a hotel con toda clase de lujos, sin duda uno de los acontecimientos por el que aumentó su popularidad fue por ser sede del asesinato del político jalisciense Juan de Dios Cañedo en 1850 a causa de un hombre que entró a su habitación y le dio treinta puñaladas. El hecho ocurrió después de una ceremonia en el salón de embajadores del Palacio Nacional junto a Antonio López de Santa Anna.
El Hotel de la Bella Unión es el hotel más antiguo que sigue en pie y fue inaugurado aproximadamente en 1840 ubicado en la Calle de Palma esquina con calle El Refugio número 37, hoy en día conocida como la calle de 16 de septiembre. Fue construido por José Besozzi, consta de dos pisos, el primero fue hecho con una estructura de metal, primera vez que se realizaba con este material. Hoy en día se puede seguir observando aunque no para su función primeramente proyectada.
Es conocido por ser la sede de diversos hechos que quedaron marcados en la Historia de México, como en el año 1847 con la rebelión de los Polkos, confilcto bélico en contra de la administración del presidente Valentín Gómez Farías en manos del general Matías de la Peña Barragán.
Durante la intervención estadounidense fue en ese hotel donde se hospedaron durante nueve meses los militares invasores, convirtiendo el lugar en un prostíbulo y salón de juegos. Durante el Porfiriato dejó de funcionar como hotel.